¿Qué es una Orden de Trabajo?

¿Cómo hacer una orden de trabajo

Una orden de trabajo sirve como una solicitud formal para llevar a cabo el mantenimiento o reparación de un equipo, sistema o instalación en particular.

Cuando se crea una orden de trabajo, normalmente incluye varios elementos importantes. A continuación te detallamos los más importantes.

Número de Orden de Trabajo: A cada orden de trabajo se le asigna un número de identificación único para ayudar a realizar un seguimiento y gestionar la solicitud de manera eficiente. Esto asegura que toda la información y actualizaciones pertinentes estén asociadas con la orden de trabajo correcta.

Información del Solicitante: Esta sección contiene detalles sobre la persona o departamento que inició la orden de trabajo. Incluye su nombre, información de contacto y, a veces, su posición dentro de la organización.

Descripción del Trabajo: Esta es una parte crucial de la orden de trabajo, ya que describe la naturaleza de la tarea de mantenimiento o trabajo de reparación que necesita ser realizado. Debe ser clara y específica, proporcionando todos los detalles necesarios sobre el problema que requiere atención.

Ubicación: La orden de trabajo especifica la ubicación exacta donde se requiere el trabajo de mantenimiento. Podría ser una habitación específica, edificio, o incluso un equipo o maquinaria en particular.

Prioridad y Fecha Límite: Las órdenes de trabajo a menudo incluyen un nivel de prioridad asignado a la tarea, indicando su urgencia. Esto ayuda a los equipos de mantenimiento a priorizar su trabajo de manera efectiva. Además, se menciona una fecha límite para asegurar que el trabajo se complete dentro de un plazo específico.

Materiales y Recursos: Si se requieren materiales específicos, repuestos o herramientas para completar la tarea, la orden de trabajo debe mencionarlos. Esto ayuda al técnico a planificar y reunir los recursos necesarios con antelación.

Técnico Asignado: La orden de trabajo asigna la tarea a un técnico de mantenimiento específico o a un equipo responsable de llevar a cabo el trabajo. Esto asegura responsabilidad y ayuda en el seguimiento del progreso.

Instrucciones de Trabajo: Se incluyen instrucciones detalladas paso a paso en la orden de trabajo, explicando cómo se debe ejecutar la tarea. Esto puede incluir pautas de seguridad, especificaciones técnicas, diagramas o cualquier otra información relevante necesaria para la finalización exitosa.

Actualizaciones y Notas de Finalización: A medida que avanza el trabajo, se espera que los técnicos actualicen la orden de trabajo con observaciones, hallazgos o cambios realizados durante el proceso. Una vez que se completa el trabajo, proporcionan notas sobre el resultado final y cualquier acción adicional tomada.

Las órdenes de trabajo son esenciales para una gestión de mantenimiento efectiva, ya que proporcionan una estructura formalizada para el seguimiento y documentación de las actividades de mantenimiento. Ayudan a asegurar que el trabajo se realice de manera eficiente, que los recursos se utilicen efectivamente y que se mantenga un registro del historial de mantenimiento para futuras referencias y análisis.

Como profesional de mantenimiento, es crucial entender la importancia de las órdenes de trabajo y seguir diligentemente las instrucciones proporcionadas en ellas. Sirven como una guía para llevar a cabo tareas de mantenimiento de manera efectiva, promover la comunicación entre los miembros del equipo y contribuir al éxito general de la operación de mantenimiento.

Aquí hay algunos puntos adicionales que pueden ser útiles para entender la importancia de las órdenes de trabajo:

Seguimiento y Documentación

Las órdenes de trabajo sirven como un registro centralizado de actividades de mantenimiento. Documentan los detalles de cada tarea, incluida la descripción del trabajo, materiales utilizados, asignaciones de técnicos y notas de finalización. Esta documentación es valiosa para futuras referencias, auditorías, reclamaciones de garantía y análisis de tendencias de mantenimiento.

Planificación y Asignación de Recursos

Las órdenes de trabajo ayudan en la planificación de recursos al especificar los materiales, repuestos y herramientas necesarios para una tarea en particular. Esta información permite a los gestores de mantenimiento asignar recursos de manera efectiva, asegurando que los técnicos tengan el equipo y suministros necesarios para completar su trabajo de manera eficiente.

Priorización y Programación

Las órdenes de trabajo desempeñan un papel crucial en la priorización de tareas de mantenimiento en función de su urgencia, importancia o impacto en las operaciones. Al asignar niveles de prioridad y fechas límite, los gestores de mantenimiento pueden asegurar que los problemas críticos se aborden con prontitud mientras se considera la disponibilidad de recursos y se minimizan las interrupciones en las operaciones diarias.

Comunicación y Colaboración

Las órdenes de trabajo facilitan la comunicación y colaboración entre los equipos de mantenimiento y otros interesados. Los técnicos pueden consultar las instrucciones de la orden de trabajo, informar sobre el progreso, solicitar información adicional o asistencia, y compartir actualizaciones con supervisores u otros miembros del equipo. Esto promueve un trabajo en equipo y coordinación efectivos.

Cumplimiento y Responsabilidad

Las órdenes de trabajo ayudan a mantener el cumplimiento de las regulaciones de seguridad, normas de la industria y políticas organizacionales. Al incluir pautas de seguridad, especificaciones técnicas y estándares de calidad, las órdenes de trabajo aseguran que las tareas de mantenimiento se realicen de manera consistente y conforme. También asignan responsabilidad a técnicos específicos o equipos para completar el trabajo asignado.

Análisis de Rendimiento y Mejora Continua

La documentación y los datos históricos capturados en las órdenes de trabajo pueden ser analizados para identificar tendencias, problemas recurrentes o áreas de mejora en los procesos de mantenimiento. Este análisis ayuda a optimizar las estrategias de mantenimiento, reducir el tiempo de inactividad del equipo, mejorar la fiabilidad y mejorar la eficiencia operativa en general.

Recuerda, como profesional de mantenimiento, es crucial revisar cuidadosamente y entender los detalles mencionados en la orden de trabajo antes de comenzar cualquier tarea. Si hay alguna incertidumbre o discrepancia, no dudes en buscar aclaraciones de tu supervisor o de la persona que solicitó la orden. Al seguir las instrucciones, documentar tu trabajo con precisión y participar activamente en la comunicación, contribuirás a una operación de mantenimiento bien gestionada.

¿Quién es responsable de una orden de trabajo?

 La responsabilidad de una orden de trabajo puede variar dependiendo de la estructura organizativa y los procesos de gestión de mantenimiento establecidos. Generalmente, los siguientes roles tienen responsabilidades específicas relacionadas con las órdenes de trabajo:

Jefe de Mantenimiento/Supervisor

El jefe de mantenimiento o supervisor normalmente es responsable de supervisar las operaciones de mantenimiento y garantizar que las órdenes de trabajo se gestionen adecuadamente. Sus responsabilidades pueden incluir:

• Priorizar y asignar órdenes de trabajo a técnicos de mantenimiento o equipos según la urgencia, recursos y habilidades.
• Revisar y aprobar órdenes de trabajo para asegurar precisión, completitud y alineación con los objetivos de mantenimiento.
• Monitorizar el progreso de las órdenes de trabajo, seguir su estado y abordar cualquier retraso o problema que pueda surgir.
• Comunicarse con las partes interesadas, como los solicitantes u otros departamentos, para recabar información adicional o proporcionar actualizaciones sobre las órdenes de trabajo.
• Asegurar el cumplimiento de los requisitos normativos, estándares de seguridad y políticas organizativas a través de la gestión de órdenes de trabajo.

Técnicos de Mantenimiento

Los técnicos de mantenimiento son responsables de ejecutar el trabajo especificado en la orden de trabajo. Sus responsabilidades pueden incluir:

• Revisar la orden de trabajo para entender el alcance, instrucciones y requisitos de la tarea de mantenimiento.
• Realizar las reparaciones necesarias, actividades de mantenimiento, inspecciones o instalaciones según lo descrito en la orden de trabajo.
• Apegarse a los procedimientos de seguridad, utilizar las herramientas y equipos adecuados y seguir las mejores prácticas para el trabajo de mantenimiento.
• Documentar el trabajo realizado, incluidos los cambios, actualizaciones o hallazgos inesperados durante la tarea.
• Comunicar cualquier problema o desafío encontrado durante la ejecución de la orden de trabajo al jefe de mantenimiento o supervisor.

Solicitantes/Clientes

Los solicitantes o clientes son responsables de enviar solicitudes de servicio o trabajo, que pueden servir como base para la creación de órdenes de trabajo. Sus responsabilidades pueden incluir:

• Describir claramente la necesidad de mantenimiento o problema en la solicitud de servicio o trabajo.
• Proporcionar detalles relevantes, como la ubicación, urgencia o instrucciones específicas relacionadas con la tarea de mantenimiento.
• Cooperar con el equipo de mantenimiento proporcionando acceso a equipos, instalaciones o áreas que requieren mantenimiento.
• Comunicar cualquier actualización o cambio en la solicitud de mantenimiento para asegurar una finalización precisa y oportuna.

Es esencial que estas partes interesadas colaboren y se comuniquen eficazmente para asegurar que las órdenes de trabajo se gestionen eficientemente y que las tareas de mantenimiento se ejecuten con éxito. Las responsabilidades y roles específicos asignados pueden variar según la estructura, tamaño y procesos de gestión de mantenimiento de la organización.

Cumplimiento normativo y regulación de las órdenes de trabajo

El cumplimiento y las regulaciones en torno a las órdenes de trabajo pueden variar según la industria, ubicación y requisitos específicos de la organización. Sin embargo, aquí hay algunas consideraciones generales al crear órdenes de trabajo:

Regulaciones de Seguridad

Las órdenes de trabajo deben cumplir con las regulaciones y directrices de seguridad específicas para la industria y el tipo de trabajo que se va a realizar. Esto puede incluir garantizar el uso de equipo de protección personal (EPP), seguir procedimientos de bloqueo/etiquetado y cumplir con las normas de salud y seguridad ocupacional pertinentes.

Regulaciones Ambientales

Si el trabajo de mantenimiento implica la manipulación de materiales peligrosos, gestión de residuos o cualquier actividad que pueda afectar al medio ambiente, es importante cumplir con las regulaciones ambientales. Esto puede incluir la disposición adecuada de sustancias peligrosas, el cumplimiento de los estándares de emisiones y el cumplimiento de los protocolos de gestión de residuos.

Normas de Equipos y Maquinaria

Las órdenes de trabajo deben alinearse con las especificaciones del fabricante, las normas de la industria y las regulaciones relacionadas con la operación, mantenimiento y reparación de equipos o maquinaria específicos. Es importante garantizar que el trabajo realizado esté dentro de las directrices recomendadas para mantener la seguridad, integridad y garantía del equipo.

Normas de Calidad y Regulaciones

En ciertas industrias, como la manufactura o la atención médica, las órdenes de trabajo pueden necesitar cumplir con sistemas de gestión de calidad, requisitos normativos y estándares como ISO 9001, ISO 13485 o regulaciones de la FDA. Estos estándares aseguran consistencia, trazabilidad y cumplimiento con requisitos específicos de la industria.

Obligaciones Legales y Contractuales

Las órdenes de trabajo deben alinearse con cualquier obligación legal o contractual. Esto puede incluir adherirse a términos contractuales específicos, acuerdos de nivel de servicio o leyes y regulaciones locales que rigen las actividades de mantenimiento.

Documentación y Registro

Es importante mantener una documentación precisa y detallada de las órdenes de trabajo, incluidos los cambios, actualizaciones o notas de finalización. Esta documentación asegura el cumplimiento con los requisitos de auditoría, inspecciones regulatorias y procesos internos de aseguramiento de calidad.

Para garantizar el cumplimiento de estas regulaciones, es recomendable involucrar a las partes interesadas relevantes, como los responsables de seguridad, expertos en regulaciones o representantes legales, al diseñar plantillas de órdenes de trabajo o procesos. La formación regular y la comunicación con los técnicos y supervisores de mantenimiento también pueden ayudar a asegurar la conciencia y el cumplimiento de los requisitos de cumplimiento y regulación.

Ten en cuenta que el cumplimiento específico y las regulaciones pueden variar según la industria, la región y el contexto organizacional. Es esencial consultar con los expertos o recursos apropiados dentro de tu organización para entender los requisitos específicos que se aplican a tus operaciones de mantenimiento.

Cómo crear una orden de trabajo en cumplimiento con la ISO 9001 y la ISO 13485

Las órdenes de trabajo desempeñan un papel significativo en el apoyo al cumplimiento de ISO 9001 e ISO 13485, dos normas internacionales ampliamente reconocidas para los sistemas de gestión de calidad (SGC) en diferentes industrias. Veamos cómo las órdenes de trabajo se relacionan con estas normas:

ISO 9001

Establece los requisitos para un SGC aplicable a cualquier organización, independientemente de su tamaño o industria. Las órdenes de trabajo contribuyen al cumplimiento de la ISO 9001 de las siguientes maneras: Control de Procesos: Las órdenes de trabajo ayudan a establecer y controlar los procesos de actividades de mantenimiento dentro de la organización. Proporcionan un marco documentado para iniciar, ejecutar y completar tareas de mantenimiento, asegurando la consistencia y el cumplimiento de los procedimientos definidos.

Planificación y Asignación de Recursos

Las órdenes de trabajo ayudan en la planificación y asignación de recursos para actividades de mantenimiento, alineándose con los requisitos de la ISO 9001 para la gestión de recursos.

Documentación y Registro

Las órdenes de trabajo sirven como evidencia documentada del trabajo de mantenimiento, incluyendo descripciones de tareas, instrucciones, notas de finalización y cualquier actualización o cambio realizado durante el proceso. Estos registros contribuyen a los requisitos de la ISO 9001 para el control de la documentación y el mantenimiento de registros.

ISO 13485

Está específicamente enfocada en los sistemas de gestión de calidad para dispositivos médicos. Las órdenes de trabajo apoyan el cumplimiento de la ISO 13485 mediante:

Trazabilidad

Las órdenes de trabajo ayudan a establecer un proceso de trazabilidad claro para las actividades de mantenimiento relacionadas con dispositivos médicos. Aseguran que el trabajo de mantenimiento esté debidamente documentado, registrado y rastreado, facilitando la trazabilidad de las acciones de mantenimiento y su impacto en los dispositivos.

Cumplimiento Regulatorio

Las órdenes de trabajo ayudan a garantizar el cumplimiento de los requisitos regulatorios específicos para dispositivos médicos. Ayudan a documentar actividades de mantenimiento, cambios y reparaciones, lo cual es crucial para auditorías, inspecciones regulatorias y el mantenimiento del cumplimiento de las regulaciones de dispositivos médicos.

Gestión de Riesgos

Las órdenes de trabajo contribuyen a los requisitos de la ISO 13485 para la gestión de riesgos al proporcionar un mecanismo para documentar y abordar los riesgos relacionados con el mantenimiento. Pueden incluir instrucciones sobre cómo mitigar los riesgos asociados con las tareas de mantenimiento y asegurar que el trabajo se realice de manera segura y efectiva.

Tanto en la ISO 9001 como en la ISO 13485, las órdenes de trabajo ayudan a las organizaciones a establecer un enfoque sistemático para la gestión del mantenimiento, asegurando consistencia, trazabilidad y adhesión a los procedimientos documentados. Desempeñan un papel vital en el control de procesos, la asignación de recursos y el mantenimiento de registros precisos de actividades de mantenimiento, todos los cuales son integrales para lograr el cumplimiento con estas normas de gestión de calidad.

Cual es la diferencia entre Solicitud de Servicio y Orden de Trabajo

Las solicitudes de servicio, también conocidas como solicitudes de trabajo, y las órdenes de trabajo son dos conceptos relacionados pero distintos en la gestión de mantenimiento. Aquí tienes una explicación de cada uno:

Solicitudes de Servicio (Solicitudes de Trabajo)

Las solicitudes de servicio o solicitudes de trabajo son generalmente peticiones o notificaciones iniciales presentadas por individuos o departamentos para informar al equipo de mantenimiento sobre un problema, reparación o necesidad de mantenimiento. Estas solicitudes pueden provenir de diversas fuentes, como empleados, clientes o partes interesadas.

Las solicitudes de servicio generalmente proporcionan información básica sobre el problema o requisito, como una descripción del problema, ubicación y datos de contacto del solicitante. Sirven como una herramienta de comunicación inicial para informar al equipo de mantenimiento sobre una necesidad de mantenimiento e iniciar el proceso de mantenimiento. Las solicitudes de servicio suelen ser registradas o documentadas para realizar un seguimiento de las demandas de mantenimiento entrantes y priorizarlas en consecuencia.

Órdenes de Trabajo

Las órdenes de trabajo, como hemos discutido anteriormente, son documentos formales que proporcionan instrucciones e información detallada sobre una tarea de mantenimiento o reparación específica. Las órdenes de trabajo se crean generalmente en base a solicitudes de servicio y sirven como una guía completa para los técnicos de mantenimiento que realizan el trabajo.

Las órdenes de trabajo incluyen detalles específicos, como una descripción detallada del trabajo a realizar, ubicación, nivel de prioridad, fecha de vencimiento, técnico o equipo asignado, materiales o recursos necesarios y cualquier instrucción o especificación adicional. Proporcionan un marco estructurado para ejecutar y gestionar tareas de mantenimiento y sirven como un registro del trabajo realizado.

Mientras que las solicitudes de servicio inician el proceso de mantenimiento notificando la necesidad de mantenimiento, las órdenes de trabajo proporcionan las instrucciones detalladas y accionables para que los técnicos realicen el mantenimiento o la reparación requerida.

En resumen, las solicitudes de servicio son las notificaciones o peticiones iniciales para necesidades de mantenimiento, mientras que las órdenes de trabajo son los documentos formales que proporcionan instrucciones detalladas e información para ejecutar y gestionar las tareas de mantenimiento. Las solicitudes de servicio sirven como punto de partida, mientras que las órdenes de trabajo proporcionan la estructura y la guía para llevar a cabo el trabajo.

Cómo gestionar órdenes de trabajo en hojas de cálculo

Gestionar órdenes de trabajo en hojas de cálculo puede ofrecer algunas ventajas, pero también tiene sus limitaciones. Exploremos las ventajas y desventajas:

Ventajas de Gestionar Órdenes de Trabajo en Hojas de Cálculo

1. Accesibilidad: Las hojas de cálculo están ampliamente disponibles y son accesibles en varios dispositivos y plataformas. Se pueden compartir fácilmente por correo electrónico o almacenamiento en la nube, permitiendo que varios usuarios colaboren en órdenes de trabajo simultáneamente.

    

2. Flexibilidad: Las hojas de cálculo proporcionan una estructura flexible que permite la personalización y adaptación a diferentes formatos y requisitos de órdenes de trabajo. Los usuarios pueden diseñar sus propias plantillas, agregar fórmulas para cálculos y personalizar campos según sea necesario.

    

3. Rentabilidad: Las hojas de cálculo están generalmente disponibles con software de productividad de oficina o como aplicaciones independientes, lo que las convierte en una opción rentable en comparación con el software especializado de gestión de órdenes de trabajo.

    

4. Familiaridad: Muchas personas ya están familiarizadas con el uso de hojas de cálculo, ya que son comúnmente utilizadas para diversas tareas. Esta familiaridad puede reducir la curva de aprendizaje y simplificar la implementación de procesos de gestión de órdenes de trabajo.

    

5. Análisis de Datos: Las hojas de cálculo ofrecen capacidades básicas de análisis de datos, como ordenar, filtrar y realizar cálculos básicos. Pueden ayudar a generar informes simples y proporcionar información sobre actividades de mantenimiento.

Desventajas de Gestionar Órdenes de Trabajo en Hojas de Cálculo

1. Automatización Limitada: Las hojas de cálculo carecen de funciones avanzadas de automatización que se encuentran en el software dedicado de gestión de órdenes de trabajo. Esto significa que tareas como notificaciones automáticas, actualizaciones de estado y programación pueden requerir intervención manual, aumentando el potencial de errores humanos y actualizaciones manuales que consumen tiempo.
   
   
2. Integridad de Datos y Control de Versiones: Las hojas de cálculo son propensas a errores humanos, como la entrada de datos incorrecta o la eliminación accidental de información. Además, mantener el control de versiones y asegurarse de que todos estén trabajando en la última versión de la hoja de cálculo puede ser un desafío.
   
   
3. Escalabilidad: Las hojas de cálculo pueden volverse engorrosas y difíciles de manejar a medida que aumenta el número de órdenes de trabajo y datos. Es posible que no manejen grandes cantidades de datos de manera eficiente y pueden volverse lentas o propensas a fallos.
   
   
4. Desafíos de Colaboración: Si bien las hojas de cálculo permiten la colaboración, la edición simultánea puede crear conflictos, con múltiples usuarios potencialmente sobrescribiendo los cambios de los demás. Asegurar la integridad de los datos y mantener actualizaciones consistentes entre los miembros del equipo puede ser un desafío.
   
   
5. Integración Limitada: Las hojas de cálculo pueden tener limitaciones en cuanto a la integración con otros sistemas o software utilizados en la gestión de mantenimiento, como sistemas de gestión de activos o control de inventario. Esto puede resultar en entradas de datos manuales y duplicación potencial de esfuerzos.

Es importante considerar estas ventajas y desventajas al decidir si gestionar órdenes de trabajo en hojas de cálculo. Para operaciones a menor escala o requisitos simples, las hojas de cálculo pueden ser adecuadas. Sin embargo, a medida que la organización crece y las demandas se vuelven más complejas, podría ser beneficioso explorar opciones de software más avanzadas y especializadas en la gestión de órdenes de trabajo.

Cómo gestionar órdenes de trabajo con un software de mantenimiento

Un software GMAO puede tener un impacto significativo en la calidad de las órdenes de trabajo. Aquí te explicamos cómo un software de mantenimiento puede mejorar la calidad de las órdenes de trabajo:

1. Plantillas Estandarizadas: Los softwares de mantenimiento a menudo ofrecen plantillas estandarizadas para órdenes de trabajo que incluyen todos los campos e información necesaria para una orden completa. Estas plantillas aseguran consistencia y exhaustividad en la captura de detalles esenciales, reduciendo la probabilidad de que falte información o esté incompleta.
   
   
2. Creación Automatizada de Órdenes de Trabajo: Con un software de mantenimiento, las órdenes de trabajo pueden ser generadas automáticamente basándose en disparadores o solicitudes predefinidas. Esta automatización minimiza el riesgo de errores humanos y asegura que las órdenes de trabajo se creen de manera rápida y precisa.
   
   
3. Información Centralizada: Los softwares de mantenimiento normalmente almacenan todas las órdenes de trabajo en una base de datos o sistema centralizado. Este repositorio centralizado permite un fácil acceso y recuperación de la información de las órdenes de trabajo, asegurando que todos los detalles relevantes estén fácilmente disponibles para los técnicos, supervisores u otros interesados involucrados en el proceso de mantenimiento.
   
   
4. Integración con Gestión de Activos: Los softwares de mantenimiento a menudo se integran con sistemas de gestión de activos, permitiendo una comunicación fluida entre las órdenes de trabajo y los registros de activos. Esta integración asegura que las órdenes de trabajo incluyan información precisa sobre el activo o equipo que se está reparando, como el número de modelo, ubicación, historial de mantenimiento y cualquier requisito o instrucción específica.
   
   
5. Actualizaciones y Notificaciones en Tiempo Real: El software de mantenimiento permite actualizaciones y notificaciones en tiempo real, asegurando que los interesados estén informados sobre el progreso y estado de las órdenes de trabajo. Esto mejora la comunicación y transparencia, permitiendo que los supervisores o solicitantes se mantengan al tanto de la finalización del trabajo, cualquier retraso o problemas que puedan surgir durante el proceso de mantenimiento.
   
   
6. Accesibilidad Móvil: Muchos softwares de mantenimiento ofrecen aplicaciones móviles que los técnicos pueden usar en el campo. La accesibilidad móvil permite a los técnicos acceder a las órdenes de trabajo, actualizar el progreso, añadir notas y capturar fotos directamente desde sus dispositivos móviles. Este acceso instantáneo y documentación mejoran la precisión y oportunidad de la información registrada en las órdenes de trabajo.
   
   
7. Informes y Análisis: Los softwares de mantenimiento suelen ofrecer funciones de informes y análisis, permitiendo a las organizaciones analizar los datos de las órdenes de trabajo. Este análisis puede ayudar a identificar tendencias, patrones y áreas de mejora en el proceso de mantenimiento, contribuyendo a la mejora continua de la calidad de las órdenes de trabajo.

En general, un software de mantenimiento agiliza los procesos de gestión de órdenes de trabajo, mejora la precisión y exhaustividad de los datos, potencia la comunicación y proporciona valiosas perspectivas para optimizar las operaciones de mantenimiento. Todos estos factores contribuyen colectivamente a la calidad general de las órdenes de trabajo y la efectividad del proceso de gestión de mantenimiento.